29 de mayo de 2006

Encierro

Hay días, como hoy, en los que para huir de la ansiedad me refugio en cualquier cosa que me evite tener que enfrentarme a lo que la provoca...




Y también hay momentos, como ahora, en los que me doy cuenta que llevo tanto tiempo encerrado en mí mismo que he olvidado como se sale de ahí...

1 comentario:

gus dijo...

Has llegado a verte a ti de lejos, ver a ese ser ansioso que en forma de taza te convierte en el cafe que las empresas de entretenimiento beben cada vez que compras libros, series, entregas tu tiempo a peliculas rallantes con respuestas inconvexas. Lo has visto nacer crecer, ahora poderoso solo queda criticarlo, adorarloy alimentarlo. Solo debes recordar quien eras cuando ese ser naciò, recordar la velocidad con la que tejias la telaraña de tus pensamientos que mas alla de hacerte libre te comprometian a irpor mas hasta que el se hizo mayor y solo te quedo tiempo para mantenerlo con vida, con esa fuerza con la quelo priste y llego a tu mundo. Es tu mundo, el recide ahi, como una planta en tu jardin, una planta de la que te enamoraste (y eso no esta mal ya que solo asi sacaste lo mejor de ella), pro te tomasteen erio el juego de amar transformando la pasion e amor paternomaternal y el instinto con el que nacimos los humanos no nos permiteabandonar a nuestros hijos asi como asi. He ahì la respuesta: Aquello en ti que pario ese ser no es humano, es algo sperior y diferente que maneja otras reglas o instintos, pero nuestro automatizmo humano, nuastra asosiacion libre (ayudado por los medios sde comunicacion) nos obligan a tratarlo como si fueran algo humano. Mi recomendacion es comenzar anhelando y visualizando aquel momento, ese instante en el que tomes las desicion de acabar con su vida. Hazlo, matalo, asesinalo al despertar una mañana de la estacion que mas te guste, sin piedad, solo tu sabes con que lo has alimentado, ese alimento que se convirtio en vicio para él y en PERSONLIDAD para ti, rompe las barreras que una vez el exterior puso en tus limitaciones y sigue adelante. Deja de regar a esa plata sin miedo a su perdida (cualidad humana ante la muerte) con la reconfortable seguridad de un nuevo espacio vacio en el limitado espacio de jardin para una nueva vida que tambien sera tuya como asi tu mundo de sensaciones.