7 de julio de 2006

Salma!

Cuando alguien me pregunta qué tipo de mujeres me gustan suelo responder que (casi) todas. Pero eso, por supuesto, no es del todo cierto. A pesar de que suelo no dar al físico más importancia de la que tiene, yo soy humano. Vamos, un hetero como cualquier otro. Y eso significa que, sea políticamente correcto o no, tengo mis preferencias.

Por ejemplo, es algo bien sabido mi fetichismo por las mujeres con gafas. Supongo que debe haber alguna explicación freudiana para esto, ya que a fin de cuentas la gran mayoría de mi familia por parte materna las usan o han usado en algún momento de su vida, yo incluido. También, influido quizás por los genes maternos, tengo una inexcusable tendencia por las delgadas (sin caer nunca en extremos, por supuesto). En cuanto a cabello, aunque no suelo fijarme en ese aspecto es notoria mi preferencia por las morenas, cosa que en un manchego no debería ser de extrañar.

Por último, quizás por el hecho de medir 1,80 (y de ser tan inseguro), me siento irremediablemente atraido por las que son más bajitas que yo. Sin llegar a tallas infantiles, pero que no superen la altura de mis hombros. Y, eso sí, que a pesar de la altura conserven sus curvas. Así que no debería ser extraño que desde el primer momento me sintiera ya no fascinado, si no incluso desarmado ante la visión de esta mujer:



Salma Hayek Jiménez, nacida hace 40 gloriosos años en México (en un lugar de nombre impronunciable) y más que conocida actriz de cine y televisión. Tampoco hay mucho que contar: hija de un político de origen libanés y una cantante de ópera de origen español, pasó un tiempo en Estados Unidos y después volvió a México para estudiar. Sin embargo le picó el gusanillo de la interpretación y lo dejó todo para ser actriz. Se hizo famosa allá en su tierra como actriz de telenovela, pero decidió probar suerte en el país vecino y después de algunos papeles menores la fichó Robert Rodriguez para su autoremake Desperado. Y el resto ya lo conocemos...




Juro que cuando apareció en la pantalla de cine, en esa escena en la que provoca un accidente de coche con el movimiento de sus caderas, se me cortó la respiración. En un Hollywood saturado de WASPS, silicona, liftings y niñas bien ver a semejante hembra latina supo a gloria. Todavía lo sabe, de hecho. Vale, muchos la criticaban por su escasa altura (no llega a un metro sesenta), pero eso no solo no me importaba sino que incluso me motivaba más aún (por lo que no es de extrañar que dos años después acabara con mi ex, de altura similar).

Sin embargo incluso los más escrupulosos acabaron enmudeciendo con esto (dedicado a quien ya sabe):




Tiene gracia que en apenas 4 minutos de actuación se convirtiera en lo más recordado, con diferencia, de toda la película. Así que no es de extrañar que desde ese momento no haya parado de trabajar. Un poco encasillada en papeles de tia buena al principio, como era de esperar, pero aún así alternando diferentes tipos de películas: comedias románticas, de dibujos, de aventuras, de terror, musicales... Una carrera que ya quisieran muchas, con candidatura al oscar incluida por Frida, esa película que hizo a pesar de que nadie creía en el proyecto (y que yo me negué a ver por el repelús que me daba ese entrecejo. Un mito erótico es un mito erótico).




Y, en fin... que a fin de cuentas yo lo que quería era poner fotos de ella. Pues eso:




















Si ya lo dice la sabiduría popular. La mujer y la sardina, cuanto más chica más rica...

10 comentarios:

Jesús León dijo...

Sabrosa elección veraniega. La Salma está para mordisquearla por todas partes.

Comparto tus gustos, aunque se echa de menos algún nuevo papel en el que luzca palmito de verdad. Mientras nos seguiremos deleitando con ese video una y mil veces.

Un saludo

El Tete dijo...

Más que por debajo de los hombros, esta tía te debe llegar al ombligo, como mucho.

El inadaptado dijo...

Una altura perfecta para... oh, dios, debo dejar de leer a JotaCe...

Virrey Mendoza dijo...

A ver, inadaptao, he visto que me has linkado. Gracias y tal. Pero, joder, me has metido en la sección ¡¡¡¡INADAPTADOS!!!!! Pero si yo soy un puto animal SOCIAL, adoro el ESTABLISHMENT, la HIPOCRESÍA, el CINISMO y el CAPITALISMO, eh, joder!!!
En fin, ya me estás cambiando de lugar. De hecho me deberías hacer una sección exclusiva para poner mi linko. Se podría llamar, ehhhmmm... GALACTUS.

Dr.Benway dijo...

VIVA MEJICO

(insértense aquí fantasías erótico-festivas)

HugoLara dijo...

Jajaja..repita conmigo amigo...Coatzacoalcos...de nuevo..Coatzacoalcos..ve que ya pudo pronunciarlo? (el lugar impronunciable donde nació la Hayek)

Saludos desde Mexico

Lucecilla dijo...

mmmmmmm...
no hay palabras...
:)

Burnout. dijo...

Pues con esos gustos, chaval, dificil te lo pones a tí mismo. Ya que para encontrar semejante moumento (uno parecido) libre y encima que se te lance, malo malo.
Todos tenemos sueños, pero mejor buscate algo más aprehensible. Eso de las tías de menos de la talla de tus hombros... ¿Sabes lo divertido que es probar con alguien más bajito? ¿No tiene su morbo? No habitualmente pero...
No te cierres a lo que te caiga, de todos lados se aprenden cosas.

Steam Man dijo...

Caderas, cintura, pechos... cara.

Eterno femenino por el que matar y morir

Sr. Bonares dijo...

Has dado en la tecla, y aunq si bien mi tipo de "mujer ideal" es alta, rubia y delgada... mis actrices preferidas para pajearme son Salma Hayek y Jenifer love Hewitt... supongo que será por esas anchas caderas y esas tetas impresionantes... vamos que haciendo un computo del número de masturbaciones que llevo desde los 10 años... creo que Salma tiene el porcentaje más alto.

Me vais a disculpar pero tengo que tocarme con las fotos del post (va en serio).