19 de julio de 2006

Confesionario (XIV) Con los huevos llenos de amor


Esa es una frase que me encantaría decir, pero que supongo sería algo impropio para alguien como yo.

Más que una confesión, esto es la constatación de un hecho irrefutable: estoy obsesionado con el sexo. No se si más o menos que la media, pero lo estoy. Pienso en ello, hablo de ello, lo consumo en cuanto tengo ocasión. Raro, muy raro, es el día en el que no me acuesto tras haber visto un poco de pornografía. Es casi patológico.

El problema viene de los motivos, más que de los hechos. Estoy obsesionado con el tema no por un gusto desmesurado hacia el sexo, sino precisamente porque apenas lo practico. A fin de cuentas ni siquiera tengo claro que me guste. Siempre estoy nervioso, tenso, más pendiente de complacer a mi pareja que de disfrutar yo mismo: algo que no consigo si no se que hacer en los preliminares y después me corro a los dos minutos. Y para colmo soy demasiado escrupuloso como para sentirme cómodo con el intercambio de fluidos que el sexo supone. "Príngate un poco, joder", me dijeron una vez.

Tengo el mal presentimiento de que cuando finalmente tenga pareja estable y pueda practicarlo con regularidad, el sexo me aburrirá con la misma rapidez con la que me aburre casi todo lo que hago...

10 comentarios:

galilea dijo...

Uffff que chungo lo planteas, lo mejor es hacer que disfrute tu pareja y luego dejarte llevar y disfrutar tu tambien, pero sobre todo... evita evita el aburrimiento.

Besos.

El Tete dijo...

Te recomiendo que antes de echarte pareja estable folles un poco por ahí y te desfogues.

Si no, es cuando viene el aburrimiento.

Virrey Mendoza dijo...

no te quejes, a mi me pasaba lo mismo con los Mosquecheetos. Te acuerdas? Eran los tres tipos diferentes de cheetos representados por tres ratoncitos que se asemejaban a las formas de los snacks de matutano: alargado, bolita y retorcidín.
Cuando los vi anunciados, sólo pensaba en ellos, noche y día, no era amor era una obsesión... luego di el paso y empecé a comerlos. Qué decepción!!! me cansé enseguida. Sin embargo lo pasé fatal cuando Matutano retiró la campaña de los Mosquecheetos. Ay, que vida más puta!

Virrey Mendoza dijo...

Consejo del año:

Por cierto, no me hagas mucho caso eh, no pretendo ser un cabrón (que lo soy) pero creo que la razón de todas tus paranoias se reduce a una cosica de ná: estás acojonao, eres cobarde EN TODO.
Piénsalo, amigo.
Chau.

El inadaptado dijo...

¿Pensarlo? ¡Pero si lo he dicho en la mitad de los mensajes que he escrito en el blog! Eso y que soy un vago, agarrado, torpe, salido y unas cuantas cosas más de las que no me acuerdo.

En fin, supongo que si fuera como Pocholo ahora estaría drogandome y acosando a jovencitas en bikini en Ibiza delante de las cámaras en vez de quejarme en un blog...

Virrey Mendoza dijo...

Y si fueras como el rey estarías en el Palacio de Miravent en agoso, no te jode.
No sé si me explico...

Y si, y si, y si....

Azena dijo...

espero que no te aburras... ;-)

Anonymous dijo...

¿Por que siempre queremos follarnos a las que estan mas buenas? O miento

Anonymous dijo...

Mira macho, tienes que volverte a tu pueblo natal y buscar una moza de tu lugar. Las penas se irán todas. Uno de los factores que inducen a estar puteado buscando porno es ese, estar fuera de tu pueblo, o crisis de ansiedad.

Azena dijo...

dios, cómo me revientan los comentarios desubicados... sobre todo cuando no me gusta lo que dicen ;-)